martes, 14 de diciembre de 2010

Bigott se fornica el folk

Después de encantar en el Gea, Bigott vuelve a Tarragona. Lo hará este miércoles en La Vaqueria y en un formato de sexteto que promete una recreación calcada de las canciones en formato estudio de su último trabajo This is the beggining of a beautiful friendship. Escondido bajo el pseudónimo de Bigott, Borja Laudo ha consolidado con este cuarto trabajo lo que ya logró con el anterior, Fin (2009), postrar a la crítica indie ante su talento.

Apenas 30 minutos de música magistral en un género folk americano adornado con piezas que juguetean con el pop. Aunque Bigott no presenta una fórmula nueva, sí recupera y enaltece de forma genial la figura de iconos como Leonard Cohen o Johnny Cash. Lo hace principalmente con su técnica vocal, enfundada en melodías traviesas, ironía y el acompañamiento vocal de Clara Carnicer, también conocida por su faceta pictórica.

genio y figura
Paco Loco, productor entre otros del último disco de Mishima, ha sido el encargado de guisar el elenco musical y también vocal del propio Bigott y convertirlo en un álbum sencillamente bueno.
Bigott llega a Tarragona quizá en estado de gracia, después de cuatro años consecutivos lanzando un disco con la discográfica Grabaciones en el Mar y en plena gira por todo el estado. En La Vaqueria, vendrá acompañado de su banda para proponer un folk con reminiscencias country y bajo la protección de una crítica tan bipolar como es la del sector indie.

Tan defendido por su espontaneidad como criticado por su falta de discurso serio, Bigott ha sabido jugar a dos cartas para situarse en el mapa musical: lo ha hecho aprovechando el auge del folk femenino pero con una propuesta curricularmente más sólida y musicalmente más rica y plural.

En una ciudad con propuestas musicales alternativas a cuentagotas y un público del sector que está ganando adeptos, Bigott es esperado como el agua de mayo en Tarragona. La Vaqueria no puede irle grande.


Entre graciosillo y pasota


Si por algo se caracteriza Bigott como personaje fuera de los escenarios es por su pose pasota, irónica, parco en palabras y de autoparodia. Incómodo para los entrevistadores, Bigott responde a los cuestiones de los periodistas con su sound machine, con la que reproduce todo tipo de sonidos adecuados para cada situación y con la que a veces irrumpe en sus propios conciertos.
Bigott tiende a frivolizar en su discurso con humor arisco con el que se desmarca de la pose de estrellita y adopta una perspectiva sarcástica sobre la crítica musical.

Bigott, dentro de 37 años

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Siempre gana la Falange

A diferencia del fútbol, en la política el partido se decide antes de jugarlo. No hay penaltis, ni goles ni rojas directas en los primeros minutos. En fin, nada que pueda trastocar tus planes en el día D. En la música ocurre algo parecido. En el proceso de creación/plagio, crecimiento y grabación de una canción o álbum se cuecen los adjetivos. Y una vez parido el trabajo es bueno o sirve para regalarlo con la Rockdelux. Luego sale a la luz y pueden producirse incongruencias. Léase Els Amics de les Arts.

El domingo hay elecciones y sólo los que tienen asimilado el concepto original de política aún conservan algunas dudas. Así que hasta el día de reflexión habrá pre partido.

La música en Tarragona es como la política. Si quieres votar, tienes que escoger al menos malo. De acuerdo, cada fin de semana tenemos música en directo. Pero es que siempre son los mismos. El otro día al llegar a casa estaba tocando El Sobrino del Diablo en el comedor y Espaldamaceta en el lavabo. Ahora parece que les Golfes Club quiere erigirse en Obama, pero parecen no saber en qué ciudad se han metido.

Música de calle en Vicenza Italia
Multitudinario concierto en Tarragona

¿Culpables? Ni mucho menos los organizadores, sino los políticos. Menos Fitos y Fitipaldis y más subvenciones culturales. Menos Tarracos Arenas y más ayudas a los bares musicales (exclúyase de momento Highland) a los que vamos cada semana. Queremos cubatas y música y no Mossos sordos.

Si no, votaremos en blanco. Nos quedaremos en casa. A escuchar a Espaldamaceta.

Paparamericano

martes, 16 de noviembre de 2010

Patrimonio Hormonal de la Humanidad para la furgoneta hippy de Volkswagen

Está viva. Por ahí, contándole viejas historias al asfalto. Vieja y menos extremada. LA HE VISTO. la VW T1, la Bully, la mítica furgoneta Volkswagen. Es preciosa. Es un ideal. Y aquí también causó estragos.


Pseudoramalazo hippie nazi

Vuestros padres también escucharon los Beatles, hicieron de Beach Boys, fumaron porritos y sí, alguna que otra anfetamina cayó. Tarragona, desde algunos de sus rincones, también suspiró paz.

my grandpapis, after love


Por eso, por toda la conducta de amor, paz y sexo que emanaba, me sumo a la petición de Patrimonio Hormonal de la Humanidad para la Bully. La UNESCO, en su ardua, infatigable, noble y contingente misión de procurar y cuidar de la poca paz que queda en el planeta, debería valorar la propuesta.

Y para recuperar el Flower Power debemos contribuir todos. Reanimemos (aún más) a los Beatles, a Janis Joplin, a los Mamas and the Papas, a El Canto del Loco. Porque ya no creemos en nada, como John Lennon.

¡Fumad, bebed, **** , amad!

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Gatillazo rural

¿Pa’ que queremos el Tramcamp?, ¿Pa’ qué quiere Reus un aeropuerto que en su irreversible progreso de expansión el destino más lejano será El Prat?, ¿Pa’ qué queremos la sala Les Golfes en Tarragona?  Una respuesta responde a la metafísica prosaica de los medios de comunicación del Camp de Tarragona: queremos ser un poco menos de pueblo.

Tener menos amigos en común en el facebook, montar desfiladas de protesta de homosexuales, que el Papa oficie y bendiga nuestra obra magna El Corredor del Mediterrani, que la mujer de la limpieza ya no se llame Toñi ni sea sudamericana, sino una Cubana que antes de llegar a nuestra tierra haya trabajado como espía para Fidel Castro. Eso queremos. Eso sí, manteniendo nuestra little soul pueblerina que en los veranos se eleva en las noches de turismo rural que genera la Orquestra Girasol.

Recreación virtual del Corredor del Mediterrani

Pero si una noche sólo  te queda limpia en el armario una camisa de estampado vichy es obligatorio ir a la estrena de Les Golfes Club. Previo paso, paseo y saludo a conocidos en la red carpet.

Tenían que tocar Febrero (no Tachenko) y La Brigada. Al final el orden se invirtió. Propuestas chulas. Más si son baratas. La claridad de La Birgada quizá recuerde algo más de lo necesario a Sanjosex. Pero son buenos. No son originales pero son jodidamente buenos.

Los de Vilanova suenan como si te susurraran en la oreja un secreto que ya conoces. Limpios, directos, mezclados arquitectónicamente. Lo hacen fácil porque sus letras son interesantes, empáticas y están encajadas con melodías emocionales. Pere Cocker Agramunt tiene voz y pluma sensibles y canta, que ya es mucho.
 
Tan valent de la brigada

martes, 2 de noviembre de 2010

¿No es música para modernos?

Me acredito para ver en directo Lagarto Amarillo pero el mismo día me entero de que Fred i Son tocan una hora antes en el Groove Bar. 3 euros. No está mal. Queda pendiente hablar de este cuchitril que cada jueves propone música en directo interesante y barata.

Los barceloneses acaban resultando los tíos con menos pinta de modernos de la sala. Suben al escenario y empiezan a tocar. Un bajo, un guitarra que arpegia, otro guitarra que la rasca y una chica muy mona que toca la batería. Xavi Rosés, el de la guitarra rascada, canta como si fuera una paloma de la Rambla metida dentro de un pote de olivas. Elisenda Daura, la batería, tiene un estilo muy annaroigense. A mí, sinceramente, la combinación fónica no me disgusta.

Tocando para las obras del AVE en Gijón
Petan bien, pero son muy lineales. Los modernos que hay en la sala van a ver Fred i Son porque Rockdelux les dedica un 4x4 y dicen que son muy naïf (yo los he descubierto en Mondo Sonoro). Pero al poco rato empiezan a hablar y molestan. Xavi está metido en su papel de cantante pero de tanto en tanto echa una ojeada viral a los modernos.

Fred i Son propone música fácil, letras de casa. Algo parecido a El Petit de Cal Eril, pero sin el rollo sutil.

Entre la atmósfera y las condiciones técnicas cuesta entender las letras. Cada vez hay más modernos y cada vez hablan más alto. Hasta que parece que Fred i Son lleven cantando la misma canción media hora.

Al final Xavi se cabrea y espeta: “La cançó que interpretarem a continuación parla de la tardor i és molt suau. Els del final no la sentireu. Només dic això…”.
Creando en casa
Luego dicen no sé qué de unos cuentos e interpretan una versión muy juguetona de Belle and Sebastian. Pero los modernos siguen pasando de la música.

Al final, como prevención de autocabreo, quien se las acaba pirando soy yo.

miércoles, 27 de octubre de 2010

Lagarto Amarillo en La Vaqueria para entrar en trance nocturno

Baile, coqueta fusión y sinceridad. La Vaqueria ha elegido la mejor noche de la semana, la del jueves, para proponer a Lagarto Amarillo. Un recital que propone a estudiantes y demás noctámbulos precoces a despegar a rebufo de la ola que encabezan grupos como La Pegatina, La Troba Kung-Fú y Gertrudis, entre otros.

Las formación madrileña sigue presentando su LP Distinto, una evolución musical respecto a Que la suerte te acompañe, su álbum debut. Cumbia, rumba, pseudorock, instrumentos étnicos y bases eléctricas componen el discurso musical de Lagarto Amarillo. Su trabajo de fogueo en las distintas salas de España y Catalunya ha dado con el resultado esperado: público básicamente joven.

Letras simples y juegos de palabras deliberadamente pegajosos consiguen separar la distancia entre la banda y su público fiel, que va ganando adeptos. Los madrileños son líricamente nobles, renuncian a la pretenciosidad y por eso es imposible separar sus letras de su música.

Con Distinto, Lagarto Amarillo ha pretendido acercarse unos centímetros más al rocky quizá sea este el secreto del creciente éxito de estos hermanos madrileños, que no han perdido la ocasión de sumarse al buen momento del mestizaje comercial. Prueba de ellos es el precio por entrada, de 10 euros, y el lleno del pasado sábado en la Sala Galileo Galilei de Madrid.

Esta noche, en la Vaqueria, propondrán a su público entrar en la quimiosfera.

domingo, 17 de octubre de 2010

Lágrimas y barbas

Sí. Yo también a veces me siento como un Peter Pan triste. Por eso a veces me gusta  
Francisco Nixon. Y qué mejor día que un domingo, cuando te sientes como un Peter Pan triste embutido en el cuerpo de Gargamel resacoso, para que Francisco Nixon te haga remar emociones adentro.

El recital de Nixon en la Sala Trono demuestra que la cultura musical en Tarragona aún da algún que otro coletazo. Y el público responde. Especialmente los new raemons, esta corriente de hombres con barba y camisas de cuadro, intelectuales, incomprendidos y parcialmente perdedores. La sala era una recreación de ‘Cómo ser New Raemon’. La cuestión es que tuve que instalarme en las escaleras, en una silla quebrantaespaldas proporcionada por la organización.


El recital estuvo chulo. Cerca de hora y cuarto, con pocas pausas y dos bises incluidos. Canciones del proyecto Francisco Nixon y de  
La Costa Brava 
que tuvo que tocar con una guitarra prestada. Una lástima, tenía ganas de escucharlo con su parlor rústica.

Canciones básicamente de contenido llorón. Desnudas, bien explotadas con la acústica, con alternancia de ritmos y arpegios en contagotas efectivos. Fran Fernández es un referente del indie español y, no nos engañemos, en parte vive de esto, porque sus letras no pasan de un pop melodrámatico anclado en los traumas postadolescentes.

Pese a todo, no está nada mal. Y menos en Tarragona, donde quejarse es dejar de comer migas.

lunes, 11 de octubre de 2010

Sueños temblad

Tengo ganas de escuchar el primer disco de estudio de Lecirke. Vale, para escuchar a Lecirke mejor nos quedamos con Sigur Ros. Pero para escuchar a cualquier banda escuchamos The Beatles.

Loops oníricos, discurso instrumental y nobleza lírica combinan el resto del perfume musical de esta banda tarraconense dispuesta a sumarse al braguetazo de la música indie catalana. Ganadores del D.O. Tarragona y recientemente del D.O. Catalunya, Lecirke siguen grabando en los estudios Reigboard de Constantí con Sergi Sabaté y esperan sacar disco a principios de 2011.

Lecirke no engaña. Ofrece caladas, humo moldeado chispeante. Contorneos melódicos suaves matizados por guitarras algo velvetianas en el mejor de los casos y coldplayereas en el peor (y no, no es un alago).

Siendo realistas, Lecirke está objetivamente lejos de cotizar alto a falta de su opera prima en estudio. Quizá una producción ingeniosa, original e imaginativa le dé relieve a la interesante apuesta que propone esta banda. Estaremos atentos. De momento, Jónsi nos seguirá mostrando el camino.

Auuum.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Els Amics de les Arts, triunfo del pagafantismo en Tarragona

Me imagino a Els Amics de les Arts tocando en el teatro de Epidauro y entonces entiendo por qué tocan en Tarragona. Pero lo más macabro de todo esto es que quizá que estos cuatro barceloneses llenarían el conservado altar griego.

Els Amics de les Arts son unos chicos que rondan los 30 años y cantan estrofas como “Vull ser el teu super heroi. Sóc super bon noi”, entre otras perlas tolstoianas. Pero lo cierto es que han levantado al público del sofá. En la Plaça del Rei de Tarragona debía haber unas 2.000 o 3.000 personas, aunque de mitad para atrás de la plaza la acústica era parecida a la de una vuvuzela metida debajo de una tapa de váter.

Tengo que confesar que ya había visto hasta tres veces al grupo dominante en los últimos Premis Enderrock. La evolución desde la primera vez que los caté hasta que me repitieron hace dos sábados es abrumante: han fichado a la Bed and Banda. En resumen: tres vientos, un batería y un bajo, alumnos privados de Salieri Decoran el escenario pero no demasiado rato, porque los presentan después de la primera canción y les mandan a preparar unos cubatas después del tercer o quinto tema.

Además, parece que a estos cuatro pijetes de Barcelona ex socios del Club Súper 3 se les ha subido el asunto a la testa y se crecen más que el Magazero por la pantalla del televisor.

Pero vayamos al concierto en sí. La psicodelia se apoderó de los niños, niñas y no-modernos minimalistas cuando saltó al escenario un hombre vestido de perro, en homenaje al metafórico tema ‘L’home que treballa fent de gos’. Y es que Els Amics de les Arts tienen algo de obsesión con ‘El llibre de les bèsties’, de Ramón Llull. Y si no escuchen ‘Armengol’, una canción sutil que los chicos se traían pregrabada de casa y aprovecharon para montar un karaoke mientras la Bed and Banda vibraba con el Barça en el camerino.

Aunque sin duda alguna, el momento más álgido del concierto (a parte de cuando por fin conseguí hacerme con un gintonic) nació de la interpretación del tema con el que se dio a conocer la banda: el Amparito Roca.

Y eso que los chavales tienen referencias culturales, aunque sólo sea conceptualmente. Que si Murakami, Lou Reed, Gordard…

Tomàtic!